Cuando un creyente deja a un lado el tiempo la devoción privada, también se descuidará su vida espiritual. Dios habla a través de Su palabra y lo utiliza para crear convicción en los corazones de sus hijos. Él también usa diferentes maneras para mostrar su amor a aquellos que lo buscan en comunión más profunda. Hay varias formas en las que todos los creyentes pueden tener comunión con Dios en privado.
Los creyentes pueden pasar tiempo con Dios: escribiendo sus pensamientos y oraciones a El, incluso grabando sus peticiones de oración junto con el tiempo y las formas en que Dios responde a sus oraciones. Meditar en la Palabra de Dios es útil, e implica el uso de la mente y las emociones para pensar y sentir acerca de la palabra de Dios, que ayuda para tomar decisiones correctas sobre la base de esa palabra, y ayuda a la persona a conocerse mejor a la luz de lo que la palabra de Dios enseña.
Los creyentes también deben enfocarse en estudiar la palabra de Dios por ellos mismos, esto es igualmente importante. Aprender cómo encontrarse con Dios en todas sus actividades y acciones diarias. Buscar a Dios se sencillo y con el pasar el tiempo se hace más fácil.
Para tener una experiencia personal con Dios que transcienda nuestra familia, amigos y sociedad necesitamos mantener una vida diaria de adoración a Dios. La Adoración a Dios debe ser vista como un acto de sumisión a El en todas las cosas. Sometiéndonos nosotros mismos a Dios envuelve obediencia a El, en SUS términos no en los míos propios.
Someterse a Dios incluye dedicar tu voluntad personal a Dios y sus propósitos. Esto implica someterse a Dios en tu vocación, en tu vida familiar, en tus pasatiempos y actividades extras. El someternos a Dios a través de dedicar nuestra voluntad a sus propósitos, requiere que estemos dispuestos a pedir lo que Cristo quiere en cada situación, y luego actuar sobre ella.
Lámpara es a mis pies tu palabra, y lumbrera a mi camino-Salmos 119:105
La palabra de Dios es una luz para nuestros pasos. Nos ayuda a navegar a través de la vida y nos enseña como tomar buenas decisiones. Pero para seguir esta guía, nosotros necesitamos estudiarla.
Martha Alonzo